U23D en Argentina


U23D, el film de la gira del grupo, con tecnología de vanguardia, se estrena el jueves. La aventura tridimensional dura 84 minutos; el espectador puede sentirse asistente de los músicos o vivir el show de la última gira del grupo entre el público, como un fan más.


Cuenta la leyenda que desde que era un niño, el pequeño Paul David Hewson hacía todo "a lo grande". La escuela, las calles de Dublín, el patio trasero de su casa, la descascarada sala de ensayo donde jugaba a ser una superestrella de rock, todo, absolutamente todo, funcionaba como una luminosa y espectacular escenografía para su monumental y hasta allí corta existencia. Desde entonces, nada cambió para él, más allá de que ahora insista en hacerse llamar Bono, a secas. El hombre de 47 años sigue moviéndose como un chiquilín y, de más está decir, sigue haciendo todo "a lo grande". ¿Megalómano? ¿Soñador? ¿Embustero profesional? Todo eso y mucho más, también.

El próximo jueves llegará a Buenos Aires la última gran fantasía de Bono y compañía, la que hace unos meses convirtió al grupo U2 en protagonista exclusivo de la primera producción filmada digitalmente en tiempo real y en tres dimensiones: U2, la película, en 3D. Una novedosa experiencia tecnológica que se suma a la estrategia con la que la industria mundial del entretenimiento intenta revolucionar el mercado cinematográfico o, al menos, conmoverlo.

La apuesta, en este caso, incluye la reformulación de cómo se verán de ahora en adelante los conciertos de rock en la pantalla grande. U2 ha sido el primero, pero a la vista de los resultados, definitivamente no será el último en involucrarse artísticamente con esta tecnología.

La butaca en el área chica

Una sala para 300 personas, una pantalla de 20 metros de altura por 26 de ancho, anteojos I-Max para visualizar con precisión el efecto 3D y las luces del cine que se apagan casi en sincro con las de un estadio que aparece como surgido de una bola de cristal. Uno, dos, tres... catorce, y el espectáculo comienza.

Durante 84 minutos, la aventura tridimensional ideada por este monstruo del rock bussiness de cuatro cabezas (cinco, si se cuenta a su manager de toda la vida; y seis, si se suma la directora visual de la banda, Catherine Owens, responsable de los registros de las giras ZooTV, POPMart, Elevation, Vertigo y directora también de U23D) propone dos rutas con la misma intensidad.

Por momentos, el espectador se recibe de colaborador privado del grupo, casi que le alcanza las guitarras a The Edge, le sirve un vaso de cerveza a Larry Mullen, chequea que la lista de temas esté en su lugar y asiste a Bono en lo que necesite mientras le canta a una audiencia de 70 mil personas. La aceitada máquina irlandesa vista desde arriba del escenario, como nunca antes.

La segunda opción propuesta por el film es vivir el concierto desde el público, pero en una imaginaria butaca de la primera fila, desde donde el fervor contagia, pero no transpira, y desde donde uno puede hasta alcanzar la mano extendida del inquieto cantante. "Es mejor estar entre la audiencia sabiendo que no tenés que estar saltando durante una hora y media, sino que solo te tenés que sentar ahí", comentó Adam Clayton al respecto, luego de la première de la película en el Festival de Sundance, el mes pasado.

Además, el público argentino tiene en U23D un bonus track muy especial. El ochenta por ciento de las imágenes y los audios fueron tomados durante la última visita de la banda al país, en marzo de 2006 y el veinte por ciento restante fue registrado en los conciertos de la misma gira sudamericana, en estadios de Brasil, Chile y México.

Así como este año Radiohead hizo famoso su lema "pagá lo que quieras" al ofrecer on line su último álbum, luego de esta fascinante experiencia tridimensional U2 bien podría promocionar este documento sobre su más reciente gira con un por demás elocuente "usted está aquí". Ver para creer.




"Tenemos mucho en común con los argentinos", dijo el cantante irlandés

Bono saluda a los porteños y asegura que "el pueblo argentino es muy parecido al irlandés"; la bandera argentina sube y baja en el gigantesco telón lumínico y el estadio de Núñez aparece cubierto por un mar de cabezas y brazos en alto. Si hasta Néstor Kirchner tiene su cameo en U23D , desde una de las imágenes disparadas por la banda en medio del show. Si bien el material con el que se editó la película se registró en los cuatro países que visitó el grupo durante su gira sudamericana de 2006, lo que se ve en la pantalla es casi por completo un mix de sus dos conciertos en Buenos Aires. ¿Por qué? Bono le dio su explicación al sitio Indie London: "Sentí que si teníamos que hacer esto ahora, lo debíamos hacer en América del Sur, ya que nuestra ausencia durante ocho años en el continente iba a asegurarnos un público vibrante y entusiasta".

-¿Y por qué escogió específicamente Buenos Aires?
Bono: -Irlanda y la Argentina tienen mucho en común, no sólo en términos de personalidades, sino también con respecto a nuestra pasión y nuestra historia compartida. Los argentinos han tenido sus dificultades políticas en el pasado. Pero nuestras diferencias pasadas no deberían impedir que vivamos un futuro mejor. Compartimos mucho en común. La única diferencia real es que... ¡ellos pueden bailar!